Marruecos el lugar de las almas sensibles

Cuando estuve por Marruecos entre a un soko bien apestoso gachoooo horribleeeee , eran las tenerías donde mezclan caquita de paloma con otras cosas porque esto es el mejor fijador para la piel y sus pigmentos y es orgánico cabe destacar. Producen  muchos objetos con piel y textil.  Son parte de su economía y modus vivendi. Luego vi a los hombres azules, tan misteriosos con sus ojazos, con sus turbantes , con sus dromedarios, y sus pacas  llenas de objetos para cambiar. Las mujeres caja  todas de negro , les vi por las orillas de sus guantes como se asomaban discretamente unos tatuajes  como símbolos, ellas llevan todo de negro entre un bulto y una Diane Pernet, hablan otra lengua antigua , y me  fije que todo mundo les daba dinero , no sé porque. En  este país son musulmanes entonces en teoría no son pedotes, no toman alcohol por lo que no encontre chupe en mi estancia para pasar una noche o bien para comer, la neta para qué con sus comidas y tés es más que suficiente , Comí cordero, pastilla, msemen, tés, café, dulces de todo tipo , me compré henna para no perder la oportunidad de parecer turista novedosa, me compre joyería ilegal con los  touaregs y los berberes, compramos aceites esenciales  en un soko de hierbas lleno de abuelos en chilabas. Me quedé con ganas de subirme a una moto y de  comprarme una dentadura falsa que las venden en puestos en la calle como si fuera prensa impresa. Fuimos a Palacios donde  vivieron jeques , y  tambíen fui a la playa del Puerto  y me tocó ver el tianguis de  las joyas con zafiros, rubíes y diamantes, no menos por supuesto. Incluso Tanzanita la prohibida de Africa. Ellos los marroquíes siempre se dirigian a mí en árabe,  y me decían que yo era nativa por lo cuál siempre me dejaron entrar a lugares exclusivos para nativos no para pendejos turistas como yo lo era en ese momento. Hoy estoy un poco triste y me pongo a pensar en mis viajes de placer  y recordar olores, experiencias y gente maravillosa que conocimos. Si existe un lugar que me seduzca  y me invite a regresar pronto es Marruecos y es que ahora entiendo a YSL, Hermes y todos aquellos  que van  a comprar desde objetos, hasta personas. Obvio lo que más ilusión me da recordar es el sonido que llamaba a el pueblo  para ir a rezar a la mezquita o desde en donde te encuentres , siempre apuntando a  La Meca. En ese momento todo se paraliza, los negocios cierran y tú te quedas   pensando de como un lugar con tanta pobreza y tanta fé te recibe siempre  con una gran sonrisa y ese  espíritu negociador para sacar los más dirhams que se pueda...así que en Marruecos desde el momento en que llegas la mayor parte de las cosas son ilusiones y nada es lo que parece. No es un lugar para gente que le gusta hacer alarde de viajar comprando moda y agarrando el pedo para descansar, pero sí de las joyas más caras sobre el planeta. Tambíen es un lugar para espirítus intensos, diría que es el lugar ideal para artistas, escritores, diseñadores y humanistas, porque es un lugar lleno de misterios esenciales que a simple vista no se ven. Seguiré informando de Essaouera el puerto de los viejos dioses y las conquistas.